Animal cautivo
Hay que asumir que se es un animal, cautivo, entre los límites poco claros del espacio cibernético, universal, dudosamente real. Soy un animal... sólo tengo esa certeza y no me queda otra alternativa que escribir poesía para humanizarme. Tal vez debo decir solamente Escribir. Sé que no es la mejor manera para instalarse en un blog dispuesta a cazar espíritus. Pero tengo un hambre de pasión metafísica que convierte en Dios todo lo que toco.
1 Voces dicen:
completamente de acuerdo.
sólo nos queremos quedar con lo que nos parece inasible o demasiado lejano.
todo lo que pueda llegar a ser peligroso es digno de ser encadenado- lo que no significa que sea aceptable el encadenar-. más detestable, a mi gusto, es cómo a ambos se les intenta domesticar.
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