(Pintura: "Desnudo bajando la escalera", de Marcel Duchamp, 1912)
(Fotografía: Duchamp vestido bajando la escalera en 1952)
(...) Es posible que haya entrado a la virtualidad/ Que vague por el ciberespacio de la mente universal/ o que haya llegado a El Dorado/ a la Fuente de la Eterna Juventud/ Todo involuciona retrocede/ se hace genésico/ Las imágenes se ablandan/ y vuelven a plasmarse en las paredes con una velocidad que abruma/ Dicen que va a temblar/ Que estamos llenos de capas que encajan mal y cojean/ La tierra es inestable/ El espacio es inestable/ Siempre prestado y variando/ Hay que dar gracias por haber vivido tanto/ Por la habilidad lograda en la resistencia poética/ Por haber soñado que éramos tierra y que teníamos un lugar seguro en ella/ Por ser y no ser querido Hamlet/ y haber oído lo que quieren decirnos los fantasmas/ Por haber vivido llenos de monólogos/ Y de sueños/ Sueños mayores a la realidad/ aunque sospechemos que los sueños/ sueños son